LOCURA

A falta del resultado de un examen por saber, casi puedo decir que el plan que diseñé hace aproximadamente cinco meses ha dado sus frutos. De momento llevo todas aprobadas, algunas de pura chiripa, otras con ayuda de los profes, y otras, las menos, por méritos propios.
Segundo año de carrera terminado, ¿qué análisis podemos hacer?
Por un tengamos en cuenta las asignaturas y sus contenidos: Todas interesantes, todas útiles para la vida profesional, y quizá en algún sentido todas necesarias.
Por otro lado consideremos a los profesores. Desde mi punto de vista se dividen en varias categorías:
1- Los que se preparan las clases, les gusta su asignatura y te motivan. Estos son los mejores, y se nota en las calificaciones, suelen ser altas.
2- Los pasotas. A estos aunque les guste su asignatura se toman las horas lectivas como un proceso burocrático fastidioso, algo así como amaestrar pulgas, una tarea desagradecida que posiblemente dé poco resultado, y por supuesto poco gratificante. Con ellos las calificaciones caen significativamente.
3- Los que no quiero volver a ver en mi vida. Sin comentarios, no se merecen ni hablar de ellos.
En definitiva, me molesta terriblemente que las materias dependan de los profes que las imparten. Esto es algo que no puedo cambiar, pero debería existir algún recurso (que funcione, quiero decir) destinado a los estudiantes para impedir que se produzcan abusos por parte de los docentes.
No obstante estoy contento con el curso, me he demostrado que con un poco de esfuerzo puedo lograr lo que me proponga. Y es que me encanta que los planes salgan bien.