domingo, diciembre 23, 2007
La antigua fábrica

Me gusta acercarme a su puerta destartalada. Entro sin necesidad de girar el picaporte. Trato de imaginar dónde estaba cada departamento: creo ver el rostro de un inventado portero; quizás aquí estaba recepción de mercancías; más allá, probablemente, se extendía el almacén; hay empleados guardando cola ante la ventanilla de pagaduría, puesto que es fin de mes; las oficinas de administración siguen intactas en mi cabeza.
¿Qué sucedió con este edificio? ¿Dónde fueron a parar todos sus empleados?